Nunca una Iglesia en silencio ante las cuestiones sociales, frente al sufrimiento de su pueblo. Tiene que reclamar firme y en voz alta, con voz de Profeta, aunque el grito parezca que se entrometa en cuestiones políticas.
Cristo nunca guardó silencio.
Cambió la ley con unas escrituras sobre la tierra cuando querían dilapidar a la mujer adúltera motivo de escándalo; no la dejó morir; y se metió con los legisladores y jueces de su tiempo; cambió la religión judía por la religión cristiana; se metió con las autoridades religiosas de su tiempo; puso orden en el pueblo en cuanto a los impuestos, "al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios"; se metió en las cuestiones sociales y ordenó a los de su casa; cambio el cordero pascual por su Cuerpo Nuevo cordero de Dios, y se mete en la vida de todos para ordenarla desde la conciencia y pedir incesantemente por que mejoremos; ...y los Obispos, Sacerdotes y Laicos de hoy,¿quieren callar?.
Las empresas abusan, el gobierno abusa, la legislación abusa y hay sacerdotes, obispos, laicos que callan; como los hay quienes no callan; y a los que NO guardan silencio.
La sociedad sin Dios les reclama silencio.
Y como siguen clamando al sordo mundo del sistema internacional entonces en su impotencia los matan. Los matan como a Monseñor Romero.
La sociedad sin Dios les reclama silencio.
Y como siguen clamando al sordo mundo del sistema internacional entonces en su impotencia los matan. Los matan como a Monseñor Romero.
Pero su grito nunca fue en vano.
Remece las estructuras cimientos de la Iglesia y hoy, hasta los adocenados dicen que fue un hombre de Dios, que #PadreRomero grita lo que ellos no gritan so pretexto de falsa prudencia. Y al Espíritu Santo se le entiende mejor con testimonios como los del Padre Romero, una catequesis teológicas tan necesarias para la vida como el martirio mismo, pero que pierden contenido y esencia cuando están acalladas.
Por eso la Beatificación de Monseñor Romero, es poner atención al grito de Iglesia cuyo eco perdura en el hoy de la Historia.
Deberían avergonzarse los que no escucharon
Deberían avergonzarse los que no reclaman, haciéndose cómplices, parte del sistema opresor y asesino.
La vida de Monseñor Romero nos dice que la teología de la vida es ser hombres y mujeres de su tiempo a la altura del corazón de Cristo, pero que tampoco NO es la #Teologíadelaliberación.
No se és Iglesia sin la mirada a los más pobres.
No se és Iglesia de tramites burocráticos en los escritorios,
Como no es Cristo sin los leprosos y marginados a los que no les espera mas que la muerte.
Como no es Cristo en defensa incluso de las adulteras y de las prostitutas, donde también hay dignidad.
Como no es Cristo sin la valentía de dar la otra mejílla y soportar los látigos de los injustos sin despertar mas violencia.
No es Cristo sin que en la revolución de quienes quieren protestar cogen las armas so pretexto de defender las causas justas. Cuando apresaron a Jesús tuvo que parar la revuelta entre los suyos y a la soldadesca, POR QUE la violencia no es camino. Y hay quienes no quieren aprender.
#TIAMARIA tiene un justo reclamo de su pueblo, hay que atenderlo, pero ellos deben entender que sin minería tampoco se puede crecer como país; pero la violencia entre pueblo y soldadesca, la muerte no es la solución ni del pueblo de Islay ni del Perú en su conjunto.
Pero hay ahí un reclamo que atender esa gente tiene razón.
Y #OllantaHumala tiene que pedir perdón por su engaño electoral; cuanta calma y paz daría y cuanta autoridad ganaría.
Necesitamos una Iglesia en cuyas venas corra el Evangelio mismo, encarnada como esta en el Hombre, es inherente a la Iglesia el problema del Hombre de hoy; por eso no puede callar y nadie callarla puede, a menos que la vean como una Institución burocrática y no como Cuerpo de Cristo.
Agradecemos a la Igleisa, al #PapaFrancisco la #BeatificaciónPadreRomero; y en la fiesta de Petecostes pidamos hoy como nunca los dones del espíritu Santo para todos:
*Para las autoridades que gobiernan, encaminadas en la fortaleza y la inteligencia de la verdad que solo la verdad nos hará libres;
* para los hombres de Dios, que con sabiduría tengan la voz firmes de los profetas hasta el martirologio como #PadreRomero;
* y para los laicos, el pueblo de a pie, la Iglesia Militante que aun caídos con el peso de nuestro personal pecado tienen que tener conciencia de su misión profética dentro del mundo que nos toca vivir y acudir a las parroquias para recibir formación.
Que sólo una formación firme y férrea nos acerca a la verdad del Evangelio aunque el relativismo moral de la sociedad de hoy nos quiera arrastrar, firmes para entender que ser hombres de nuestro tiempo no significa mucho menos la Teología de la Liberación, que no tiene mas nombres, ni clichés ni etiquetas que la DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA encarnada en el evangelio mismo.
¡ FELIZ PENTECOSTES!